Uso medicinal de Las Hojas de Tabaco.
Las propiedades curativas del tabaco se conocen desde hace muchos años. Las hojas de tabaco se procesaban anteriormente para la producción de unas suspensiones terapéuticas. De las hojas de tabaco más conocidas, se han preparado diferentes tipos de extractos terapéuticos. Las hojas de tabaco permitirán rápidamente curar las dolorosas heridas y servían también para paliar los efectos de las lesiones graves. En las sociedades primitivas usaban el tabaco en rama como un remedio para los nervios y la concentración del agente estimulante. La capacidad única de las hojas de tabaco para reducir el dolor eran también una ventaja inestimable para las antiguas parteras. Otro ejemplo era que cuando una madre daba a luz, y se utilizaba el líquido de esta planta todo este proceso pasaba por menor dificultad. Curiosamente, el tabaco crudo todavía se utiliza como una panacea en el arte de la medicina tradicional china.
El tabaco una oportunidad en la lucha contra el cáncer
La planta de tabaco se ha conocido en detalle por los científicos en el plano biológico. Este hecho dio lugar a la separación de tabaco ciertas proteínas específicas que pueden imitar los anticuerpos producidos por el cuerpo humano, cuya actividad es esencial en la lucha contra el cáncer. Esa idea ha sido arreglada por el personal en representación de la Escuela de Medicina de la Universidad de Stanford. Compuesto de fármacos basado en tabaco de orientación contra las células de linfoma folicular, que pertenece a los cánceres del sistema inmune. Con el estado actual de la investigación, el uso de proteínas extraídas de tabaco es cerca de la entrada de uso generalizado. Esto podría revolucionar la metodología de tratamiento de linfoma folicular. Terapias utilizadas actualmente son de hecho ineficiente y el resultado en la liberación excesiva de toxinas en el cuerpo.
La esencia de este concepto pionero están correctamente extraído a partir de los anticuerpos de la planta del tabaco, en otras palabras, las inmunoglobulinas. Estas son proteínas que exhiben valiosas capacidades de unirse selectivamente a células específicas. Si para la fabricación utilizará correctamente emparejadas inmunoglobulinas (anticuerpos), entonces a través de ellos serán atacadas solamente las células enfermas. Los anticuerpos se unen a moléculas específicas en su superficie, que de esta manera serían marcadas como un objetivo para el ataque del sistema inmunológico humano.